El alcoholismo en los adolescentes es un problema trágicamente común que provoca miles de muertes cada año. Incluso aquellos adolescentes que aún no son adictos al alcohol tienen más probabilidades de desarrollar trastornos por consumo de alcohol más adelante en la vida si comienzan a beber a edades más tempranas.
Aunque la adicción al alcohol a menudo se considera un problema de adultos, el alcoholismo adolescente es un problema muy real y común. El alcohol es la sustancia de abuso más común en todo el mundo, incluso en personas menores de 21 años.
Según el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad, el consumo de alcohol suele iniciarse en España alrededor de los 13 años. El 75’1% de los adolescentes de 14-18 años ha consumido alcohol alguna vez en su vida, 6 de cada 10 adolescentes, se han emborrachado alguna vez en su vida y 1 de cada 3 lo ha hecho en los últimos 30 días.
Cómo afecta el alcohol a los adolescentes
Los adolescentes españoles piensan que consumir 4 o 5 copas los fines de semana no tiene por qué acarrearles problemas de salud. En realidad, consumir alcohol tiene graves efectos son la salud física, psíquica y social, así como en el desarrollo de la persona. El cerebro de los adolescentes es vulnerable al efecto del alcohol.
La falta de madurez psicológica propia de estas edades dificulta el manejo de las sensaciones y los efectos que produce el consumo de alcohol. Disminuye la atención, la capacidad y tiempo de reacciones y la toma de decisiones no es la adecuada, puesto que lo dificulta enormemente. Por si fuese poco, el consumo de alcohol aumenta las actitudes violentas, las agresiones, las alteraciones en las relaciones con toras personas, aumentan los problemas con estudios y las conductas de riesgo, etc.
En realidad, consumir alcohol tiene graves efectos son la salud física, psíquica y social, así como en el desarrollo de la persona. El cerebro de los adolescentes es vulnerable al efecto del alcohol.
Además de los muchos impactos negativos en la salud que son causados directamente por el consumo de alcohol, los jóvenes bebedores son especialmente vulnerables a las muertes relacionadas con el abuso del alcohol.
La motivación para beber alcohol
Normalmente los adolescentes comienzan en el consumo de alcohol por varias razones:
- Piensa que está bien
- Quieren encajar en sociedad
- Ven a los padres beber e imitan la conducta
- Quieren sentirse más cómodos cuando se relacionan con otros
- Prueban ante los demás que son “guays”
- Se sienten presionados por otros para beber
- Piensan que así harán más amigos
- Creen que bebiendo alcohol serán aceptados por sus iguales
- Intentan combatir sentimientos negativos o problemas emocionales como la ansiedad o la depresión
- Intentan mostrar que saben tomar decisiones como los adultos
No debería estar normalizado
El consumo de alcohol está normalizado dentro de la sociedad en la que vivimos y eso los adolescentes lo ven diariamente. Cada vez el consumo de alcohol comienza antes, y con ello todos sus riesgos, los menores son los que se perjudican más. Es necesario hablar hoy para evitar un problema mayor el día de mañana.
En la actualidad, el consumo de alcohol se normaliza como un articulador del tiempo libre y de carácter social entre los jóvenes.
Riesgos del consumo de alcohol
El problema actual radica en que los adolescentes cada vez que beben, lo hacen en cantidades más elevadas en cortos períodos de tiempo, algo que se conoce como «binge drinking”. Existen algunos factores de riesgo en el consumo de alcohol, según indica el Ministerio de Sanidad, Política Social e Igualdad:
Trastornos relacionados por el comportamiento hacia el alcohol:
- Abuso o consumo perjudicial
- Dependencia del alcohol
Trastornos relacionados cosnlos efectos directos del alcohol sobre el cerebro, o trastornos incluidos:
- Intoxicación por alcohol
- Abstinencia alcoholica
- Delirio por abstinencia
- Trastorno amnésico
- Síndrome de Wernicke-Korsakow
- Demencia
- Trastornos psicóticos (con delirios o alucinaciones)
- Trastornos del estado de ánimo
- Trastornos de ansiedad
- Disfunciones sexuales
- Trastornos del sueño
- Alteraciones de las relaciones con la familia, compañeros y maestros
- Agresiones, violencias, alteraciones del orden público
- Adopción de conductas de alto riesgo,
- Actividades sexuales de riesgo
- Incremento de la enfermedad alcohólica y de serios problemas de dependencia en jóvenes
- Alteraciones en los procesos de memoria y aprendizaje, con cambios cerebrales, tanto a nivel funcional como estructural
El consumo de alcohol pone a los adolescentes en riesgo de muchas consecuencias diferentes. Beber grandes cantidades de alcohol mientras se desarrolla la identidad puede obstaculizar el crecimiento personal y hacer que sea muy difícil hacer malabares con las responsabilidades escolares y hogareñas, lo que puede afectar negativamente el futuro de uno mismo.
Muchos adultos jóvenes están aprendiendo a conducir y aprendiendo a socializar, y cuando el alcohol se convierte en parte de estas experiencias, puede deformar en gran medida la percepción de la vida y el desarrollo de los adolescentes.
Señales de advertencia de alcoholismo adolescente
Las señales de advertencia comunes del alcoholismo adolescente incluyen:
- Beber solo o aislado
- Salir con amigos que beben
- Comportamiento temerario
- Beber con mayor frecuencia
- Beber cantidades crecientes de una sola vez
- Buscar excusas para el alcoholismo
- Cambios extremos en el comportamiento
- Retirarse de amigos y familiares
- Borracheras adolescentes
Debido a la inexperiencia con el alcohol, generalmente una menor aversión al riesgo y la susceptibilidad a la presión de grupo, los adolescentes tienen un riesgo sustancialmente mayor de beber en exceso que la mayoría de los otros grupos de edad. El consumo excesivo de alcohol se define como consumir 4 o más bebidas alcohólicas en menos de dos horas para las mujeres, o consumir 5 o más bebidas alcohólicas en menos de dos horas para los hombres.
Una vez que se logra una alta tolerancia al alcohol, los jóvenes bebedores pueden fácilmente experimentar un trastorno por consumo de alcohol, ya sea cuando aún son menores de edad o en su vida adulta.
Beber en exceso afecta el cuerpo, creando síntomas incómodos como vómitos, resacas, dolores de cabeza y poca energía. Si bien, el consumo excesivo de alcohol no necesariamente lo convierte en un alcohólico, es uno de los principales factores que contribuyen al alcoholismo adolescente. Beber en exceso aumenta la tolerancia al alcohol. Una vez que se logra una alta tolerancia al alcohol, los jóvenes bebedores pueden fácilmente experimentar un trastorno por consumo de alcohol, ya sea cuando aún son menores de edad o en su vida adulta.
¿Qué hacer?
El consumo de alcohol por menores de edad puede exponer a los adolescentes a una letanía de consecuencias, pero hay esperanza. Si tu hijo muestra signos de alcoholismo o cambios en el comportamiento debido al aumento del abuso de alcohol, habla con un profesional de la salud mental porque os podrán guiar con programas de tratamiento adecuados dependiendo de la situación del menor. Pero si crees que el problema aún no es tan grave, sigue los siguientes consejos.
1.-Habla con los adolescentes
Habla pronto y frecuentemente con niños y adolescentes sobre sus inquietudes respecto al alcohol. Las conversaciones breves y frecuentes son más efectivas que “la gran charla”.
- Comunica claramente tus opiniones y expectativas, estable reglas y sé consistente en hacerlas cumplir.
- Pregunta sobre las actitudes de los amigos de tu hijo y descubre si siente presión por beber. Habla con él y ayúdale a mejorar las habilidades sociales para resistir la presión del grupo y poder decir que no al alcohol.
- Mantén una buena confianza y la comunicación abierta con tus hijos adolescentes. Así a medida que crezcan si se enfrenta a nuevas situaciones y desafíos podrán tener contigo la confianza suficiente para recurrir a ti cuando lo necesiten.
2.-Sé un modelo de comportamiento responsable
Tienes que liderar con el ejemplo, puesto que es la parte más importante para influir en las actitudes de los adolescentes respecto al consumo de alcohol y ante cualquier otro aspecto importante. Los padres siempre serán su mejor ejemplo. Para ello:
- Limita la cantidad y la frecuencia con lo que bebes
- No conduzcas nunca después de beber
- Muestra que los adultos pueden disfrutar sin alcohol
- Siempre ofrece opciones de bebidas sin alcohol para los ratos de ocio
- No glorifiques a las personas que beben en exceso
3.-Participa en la vida de tu hijo adolescente
Los adolescentes tienen menos probabilidades de beber cuando sus padres participan activamente en sus vidas y proporcionan un equilibrio de disciplina y apoyo. En este sentido, mantente conectado con tu hijo adolescente y hazle saber, a través de tu ejemplo, conversaciones y reglas, lo importante que es para ti que no consuma alcohol.
Los adolescentes no tienen conciencia del problema que puede suponer el consumo del alcohol, por eso es necesario que les expliques los riesgos que tiene para su vida y su salud. Pero sobre todo, recuerda que debes predicar con tu ejemplo y apoyarlo con tus palabras.
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