Según Students Against Destructive Decisions (SADD), la mitad de todos los estudiantes de secundaria han probado drogas cuando se pasan la escuela secundaria. La mayoría de los adolescentes prueban drogas y alcohol para encajar y pasar un buen rato con sus amigos.
Consideran las drogas como una forma casual de aliviar el estrés. Sin embargo, el uso recreativo puede convertirse rápidamente en una adicción, y elegir consumir drogas se convierte en una necesidad física y psicológica.
Vivir con un adolescente adicto: señales de alerta
Vivir con un adicto puede separar a una familia. El dulce niño o niña que solías conocer puede haber desaparecido aparentemente, reemplazado por alguien que ni siquiera reconoces. Puede comenzar a robarte, o desaparecer durante días, dejándote pensando y preocupado. Y tristemente, no solo afecta a tu hijo adicto, sino que afecta a todos en su vida. Aunque parezca que eres el único que está lidiando con un adolescente adicto, no estás solo.
El primer paso para hacer frente a un adolescente adicto es saber qué señales buscar. Teen Drug Abuse , una organización que proporciona información y recursos de tratamiento para adicciones de cualquier tipo, enumera las siguientes señales de advertencia. Las que debes tener en cuenta son las siguientes:
- Disminución del interés en actividades que tu hijo adolescente alguna vez disfrutó.
- Cambios en las calificaciones y el rendimiento escolar.
- Cambios de humor o depresión impredecibles que parecen más que las hormonas adolescentes promedio.
- Pérdida de amistades o un nuevo grupo repentino de amigos sobre el cual tu adolescente parece reservado.
Si tu hijo adolescente presenta estas señales, es hora de pedirle ayuda. El primer paso es lograr que tu hijo se dé cuenta de que tiene un problema. Aunque no podrás ayudarle hasta que él quiera ayudarse a sí mismo, puedes hablar con él sobre sus inquietudes. Tendrás que estar preparado para escuchar excusas y negaciones sobre su comportamiento. Este proceso puede ser increíblemente frustrante.
Qué hacer si tu hijo es adicto
Si te has dado cuenta de que tu hijo es adicto, lo primero que debes tener es entereza y ayudarle a salir de dónde se ha metido. Para ello, estos consejos te pueden servir de gran ayuda:
- No permitas que tu hijo toque fondo.Cuanto antes comience el tratamiento de la adicción, mejor, así que habla con él tan pronto como comiences a notar las señales de alerta. Tienes que asegurarte de tener un sistema de apoyo, como familiares y amigos, con el que puedas hablar y confiar. Es importante no descuidar tus propias necesidades emocionales.
- No inventes excusas para tu hijo adolescente ni trates de ocultar su problema. Por mucho que quieras que esté a salvo, tratar de protegerlo de las consecuencias negativas de su adicción solo obstaculizará su camino hacia la recuperación.
Recuerda, puedes dar tu apoyo y aliento, pero no puedes obligar a un adicto a cambiar. No te culpes por ello.
Recursos para tu adolescente
Si tu hijo adolescente ha admitido su problema y está listo para recibir ayuda, tiene una variedad de opciones de rehabilitación disponibles, que van desde instalaciones residenciales de rehabilitación y tratamiento ambulatorio, hasta terapias específicas. Para saber qué recursos tenéis disponibles, habla con tu médico sobre lo que ocurre para que pueda darte la información que necesitas para comenzar a solventar el problema.
En ocasiones, la rehabilitación puede costar dinero, sobre todo en instalaciones privadas, por eso es necesario que busques bien y encuentres los recursos que se adapten a vosotros y que podáis costear y realizar. Los adolescentes muy adictos pueden necesitar un programa residencial que dure 90 días o más, mientras que un adolescente menos dependiente podría beneficiarse de un programa de 30 días.
Recuerda de por qué estáis buscando ayuda para tu hijo adolescente y ten en cuenta que un programa de rehabilitación exitoso tendrá como objetivo que sea lo suficientemente autosuficiente como para hacer las cosas bien.
La adicción puede ser una situación de vida o muerte para tu hijo adolescente, y el resultado más valioso que la rehabilitación puede proporcionar es el potencial para salvar su vida. Aunque saber esto no hará que la rehabilitación sea más barata, pero hará que la factura merezca la pena pagarla.
Recursos para padres
Aunque ayudar a tu hijo adolescente es tu primera prioridad, obtener tu ayuda debería ser tu segunda. La adicción de tu hijo adolescente probablemente ha causado estragos en su vida personal y profesional. La rehabilitación, el asesoramiento y la terapia pueden tener un gran impacto en vuestra economía, y los sentimientos de culpa y remordimiento pueden tener implicaciones en tu matrimonio, vida familiar y amistades.
Obtener ayuda no solo te beneficiará a ti, sino que también te ayudará a brindarle a tu hijo y a tu familia el apoyo que necesitáis. Algunas opciones de ayuda pueden ser las siguientes:
- Programas de ayuda para adolescentes adictos.
- Terapia psicológica individual o familiar
- Terapia matrimonial en caso de que os haya provocado conflicto la adicción de vuestro hijo adolescente.
- Buscar un grupo de apoyo para compartir experiencias
- Educarte sobre este problema
Este problema no es fácil para las familias, no lo es tampoco para los hijos adictos. Pero es muy importante no decaer en el camino de la rehabilitación para que el menor sienta que está apoyado, que es respetado y querido todo el tiempo. Con el apoyo de la familia se sentirá con más fuerzas para poder salir antes y de mejor manera de esa situación tan complicada en la que se ha visto metido.
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