Leí hace poco que «un idioma te pone en un pasillo durante toda la vida. Dos idiomas te abren todas las puertas a lo largo del camino». Frank Smith.
Podríamos matizar y hasta discutir esto. Y no poco. Porque un idioma -y más, si cabe, nuestro español o castellano, maltratado increíblemente por alguna administración- te abre puertas, ventanas y hasta cielos… Sin hacer de menos a otras lenguas. Porque ¡cómo se pueden disfrutar algunas de nuestras obras literarias más universales! ¡Qué gozada poder comunicarse con tantos millones de habitantes que comparten con nosotros idioma, cultura, raíces y espiritualidad!
Valorar, amar lo propio, no es para nada incompatible con abrir más allá de ello la mente y el corazón hacia otras realidades, conociendo a otras personas. Para ello, es importante comunicar. Y hacerlo, a veces, en otras lenguas. Recuerda que somos seres sociales. Somos desde otros, con otros y para otros.
Te hablaba de hablar otras lenguas y ésta es una época propicia para viajar al extranjero si quieres potenciar el aprendizaje de idiomas (inglés, francés, alemán…) en inmersión plena. Si la cartera y otras circunstancias te lo permiten.
En cualquier caso, el conocimiento y dominio de idiomas adicionales al tuyo nativo te abre grandes posibilidades profesionales y sociales. De hecho, el desconocimiento de alguno en concreto de ellos (p.ej. el inglés), te puede cerrar muchas, muchas puertas en el ámbito laboral.
Valorar, amar lo propio, no es para nada incompatible con abrir más allá de ello la mente y el corazón hacia otras realidades, conociendo a otras personas.
Hay personas que, por distintas causas, no pueden viajar al extranjero. ¿Cómo podrían aprovechar sus vacaciones para potenciar su aprendizaje de idiomas? Hace poco ofrecí una charla en un espacio de una residencia universitaria navarra, CampusHome. Creo que merece la pena repasar alguno de los contenidos más prácticos. Déjame que te cuente.
Te ofrezco 10 ideas:
- Lectura: Si hay algún ámbito que te gusta especialmente (recetas de cocina, crónicas deportivas, novelas policiacas, lectura espiritual…), sumérgete en todo lo que se publique en dicho idioma. Tienes libros, revistas, periódicos… ¡No olvides los libros digitales con audio! Disfrutarás leyendo y… aprenderás un montón.
- Audiovisuales: Tienes YouTube, videos, televisiones y radios digitales, podcasts, audiolibros, películas o series en V.O., en fin, un montón de canales. Puedes disfrutar, también, de todas aquellas temáticas que más te gusten. Irás haciendo “oído”, aprenderás nuevo vocabulario, y mejorarás sustancialmente. Si tienes dificultades en la tele, o en el ordenador, puedes empezar viéndolos con subtítulos (eso sí, en el mismo idioma en el que hablan, esto es, en V.O.) que te servirán de apoyo de cara a tu mejor comprensión. No olvides entre los recursos los videojuegos.
- Música: Escucha esos grupos favoritos que cantan en el idioma que quieres practicar: ¡No empieces (o sí) por el rock duro! Puedes encontrar, además, su letra en internet.
- Clases online: Hay muchísima oferta de ellas. Algunas son gratuitas y otras de pago. Estas clases no son sólo de idiomas. Existen, por ejemplo, universidades norteamericanas que ofrecen clases gratis en inglés sobre distintas materias (historia, literatura, informática, etc.).
- Apps: Existen numerosas aplicaciones, incluso gratuitas, que te permiten practicar y aprender idiomas. Busca las más recomendadas y aprovéchalas en tu móvil.
- Redes sociales: ¡Sigue redes sociales en el idioma que deseas practicar cuyos contenidos te interesen! ¡Participa en ellas!
- Amigos o conocidos extranjeros: Hay oportunidades de compartir tiempo presencial (e incluso online) con personas que quieren aprender tu idioma mientras te ayudan a que tú mejores en el suyo.
- Voluntariado online: Te puede sonar raro, pero te damos un ejemplo: hay personas mayores en otros países que se sienten solas o desean mantener conversaciones con alguien que les hable en su idioma. Tú puedes ser uno de los voluntarios que lo haga. Harás mucho bien y aprenderás un montón.
- Cuidado de niños extranjeros: Curiosamente, con los niños que hablan otro idioma, puedes practicar y aprender mucho. Su nivel de vocabulario es más básico, sus expresiones más sencillas, y nunca tienes el “pudor” de que vas a hablar con ellos y puedes cometer faltas… Es curioso, pero a muchos españoles nos da vergüenza no dominar de forma fluida un idioma. ¡Nadie nace aprendido!
- Usa -con inteligencia- la IA: Si la utilizas adecuadamente, te abrirá a nuevos recursos y oportunidades en cualquier idioma. Úsala con inteligencia “natural”.
¿Se te ocurre alguna idea más? ¡Compártela!
¡Feliz verano! ¡Y no te olvides de disfrutar del español!
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