¿La protección de las prestaciones por maternidad serán el principio de un gran paso hacia la protección y reconocimiento de esta situación en la vida de las mujeres?
En contra del criterio establecido hasta ahora por la agencia tributaria, el Tribunal Supremo ha declarado exentas del pago de IRPF las prestaciones por maternidad percibidas de la Seguridad Social, ratificando así una sentencia del año 2017 del Tribunal Superior de Justicia.
Esta medida beneficiará a 1,085 millones de mujeres, según Gestha (Técnicos del Ministerio de Hacienda), a lo que se puede añadir .
La justificación de esta Sentencia considera que esta situación está incluida en el supuesto previsto en el párrafo tercero, letra H, del artículo 7 de la Ley de IRPF, que dispone que “igualmente estarán exentas las por nacimiento, parto o adopción, hijos a cargo y orfandad”, abarcando a todas las prestaciones por maternidad, sin distinción del órgano que las emita.
Los efectos retroactivos de esta sentencia establecen el año 2014, como año de referencia a partir del cual podrán solicitar dicha devolución, las personas que hayan disfrutado bajas de maternidad desde esa fecha
¿Cómo realizar la reclamación?
Presentando un escrito de solicitud de rectificación de autoliquidación y devolución de ingresos indebidos de los ejercicios en los que se percibieron las prestaciones, y presentar en Hacienda una fotocopia de la declaración, así como de los datos fiscales del ejercicio reclamado junto con el modelo.
Trabajadoras Autónomas
Sin duda esto es un pequeño avance en cuanto a medidas para proteger la familia y la maternidad, que junto con las ayudas reguladas en La Ley de reformas urgentes aprobada por el Senado (https://infoautonomos.eleconomista.es/blog/medidas-que-si-estaran-en-la-nueva-ley-de-autonomos/ ) el 11 de octubre de 2017 para las madres que son trabajadoras autónomas, supone por lo menos una toma de conciencia del valor de dicho momento en la vida laboral de la mujer.
La bonificación del 100% de la cuota en aquellas personas autónomas que se encuentren en descanso por maternidad, sin obligación de contratar a un tercero, es una cierta ayuda a la muchas veces complicada situación a la que se enfrentan en comparación con las madres que cuenten con un contrato laboral.
De cualquier forma queda mucho camino por delante y visibilizar la maternidad dentro del mercado laboral es uno de los retos.
Muchas mujeres han optado por dejar puestos de trabajo y ser autónomas para poder conciliar vida familiar y laboral, en lo que se refiere simplemente a la libertad de horarios, con la dificultad añadida a la hora de contratar una sustitución para un trabajo para el cual, todo el mundo sabe, no hay horarios. Por tanto estas medidas no dejan de ser pequeñas ayudas hasta que se produzca un cambio de mentalidad en cuanto a la valoración de esta faceta insustituible y necesaria de la mujer.
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