Septiembre es el mes de la vuelta al cole y mientras nuestros hijos ya están sentados en las aulas dispuestos a aprender, los políticos todavía no han hecho los deberes… La educación sigue siendo la asignatura pendiente de nuestra sociedad.
Cuando vives en distintos países, buscas colegio, hablas con padres y educadores, comparas sistemas educativos (convencionales y alternativos, europeos y americanos, públicos y privados)… reafirmas tu idea de que la educación es uno de los pilares fundamentales sobre los que debe sostenerse un buen país. Por eso, debería ser una prioridad absoluta e inaplazable. Una oportunidad de aprendizaje, al alcance de todos, independientemente del bolsillo, del método o las leyes.
Un sistema educativo obsoleto
En EE.UU., el documental “Most Likely to Succeed”, abría hace unos años el debate, manifestando las deficiencias del sistema educativo actual. Un sistema concebido para cubrir las necesidades de la industria. Pero hoy, los ordenadores han sustituido en gran medida a las personas, son capaces de hacer por sí solos casi cualquier cosa y harán más en el futuro. El mundo es global, los mercados han cambiado, hemos pasado de la era industrial a la era de la información hasta llegar a la era digital, pero el sistema educativo sigue siendo el mismo.
El premiado documental, explora el proyecto educativo de una Escuela de San Diego (California), con nuevos enfoques más prácticos y creativos con los que inspirar a estudiantes, profesores e instituciones de todo el mundo.
Algunos colegios y universidades ya han empezado a cambiar sus objetivos y la forma de enseñar, pero los sistemas educativos deben transformarse para que las personas puedan cubrir satisfactoriamente los puestos de trabajo que la sociedad demande, algunos todavía por inventar.
Antes, tener un título universitario garantizaba un trabajo seguro, pero hoy tener incluso un máster, no es sinónimo de éxito en ningún país. Las empresas cada vez valoran menos los conocimientos y más las habilidades para trabajar en equipo, tomar decisiones, solucionar problemas y saber comunicar de forma apropiada.
No sólo conocimientos, también creatividad y valores
Como madre y, según mi experiencia, creo que un buen colegio es aquel que además de transmitir conocimientos, fomenta las habilidades de cada alumno y valores como el respeto por uno mismo, por el otro y por el entorno. Esto favorece la autoestima, la empatía, la tolerancia y el cuidado del medioambiente, algo fundamental en un mundo global.
Muchos educadores consideran que entrenar la memoria es importante, pero lo es más la experimentación y la creatividad, como herramientas para asimilar conceptos y buscar recursos y soluciones.
Por otro lado, deberíamos darle a la olvidada asignatura de Filosofía, el lugar que le corresponde, porque enseña a pensar desde pequeños y fomenta el pensamiento crítico. Cualquier análisis, búsqueda o decisión, personal o profesional, comienza con una reflexión. La exitosa serie catalana de televisión “Merlí”, pone de manifiesto cómo la Filosofía, enseñada de forma divertida y cercana, puede aplicarse a la vida actual.
La importancia del Arte, el Deporte y la Música
En cuanto a las asignaturas que muchos consideran “de relleno”, el tenor José Manuel Zapata, hablaba en una charla de “Aprendemos Juntos” (BBVA), de la importancia de la música en nuestra vida y que debería ser una asignatura vital en los colegios. De lo bueno que es educar el oído de nuestros hijos, que escuchen música, canten o toquen un instrumento. La música mejora la empatía, soluciona problemas del habla, ayuda a relacionarse y a formar al ser humano, según el tenor.
Por su parte el biólogo David Bueno, iba más allá, comentando que era una pena limitar las horas de Música, Plástica y Educación Física, porque son los aprendizajes más transversales. En su opinión, especialmente en primaria, el resto de asignaturas deberían construirse sobre ellas. Por ejemplo, la educación física, enseña a secuenciar no sólo movimientos, sino también palabras y cálculos matemáticos. Además, activa y facilita las conexiones entre neuronas cerebrales.
Según su opinión, la música es la mejor gimnasia cerebral y una de las pocas actividades que activa todo el cerebro simultáneamente. Al igual que la música, el arte y la plástica, apelan a las emociones y éstas son fundamentales en cualquier aprendizaje, según el biólogo.
Educar en un mundo globalizado
David Perkins, doctor en matemáticas e inteligencia artificial del Instituto de Tecnología de Massachusetts, es una de las autoridades más respetadas a nivel mundial en el ámbito de la educación. Su trabajo parte de la base de que muchas de las cosas que se aprenden en la escuela se olvidan o no tienen una utilidad práctica. Por eso se ha centrado en la importancia del desarrollo de la creatividad, el pensamiento crítico, la resolución de problemas y las estrategias de razonamiento en las artes y la ciencia.
En el marco del Ciclo de Conferencias Internacionales de Educación y Tecnología, realizado por Fundación Telefónica (EducaRed) hace unos años, Perkins ya hablaba de crisis en el sistema educativo actual, pero también de oportunidad.
En su opinión, siempre hemos educado en el terreno de lo conocido y eso ya no sirve en el mundo globalizado. Un entorno lleno de interacciones e incertidumbres que necesitan de otras formas de comunicación, colaboraciones y razonamientos más sofisticados. Según el experto, debemos educar para aprender a manejar lo desconocido y ser más flexibles en nuestra vida profesional y personal. Por eso es fundamental que tengamos claro: ¿Qué enseñar? y ¿Cómo enseñar? Hacer una revisión de los métodos y contenidos del pasado, con un enfoque diferente, de lo local a lo global, para poder entender el futuro.
Perkins añade que la tecnología digital juega un papel fundamental a la hora de transformar la educación convencional. No sólo por la rapidez en la búsqueda de la información o la escritura, sino porque nos da la posibilidad de crear nuevas realidades para entender complejos conceptos.
Reinventar la educación en la Era digital
Para promover el debate en la era digital, se celebra del 2 al 4 de octubre, EnlightED. El congreso educativo que promete convertir a Madrid en la capital de la innovación educativa. Lo hace después del éxito de la pasada edición para hablar de “La Educación, como palanca fundamental de la Innovación”. Para ello, expertos mundiales en educación e innovación, hablarán de diversas cuestiones sobre cómo preparar las escuelas del futuro, cómo formar a los profesionales o cuáles son los límites éticos de la tecnología.
En mi opinión, innovar siempre es un avance, pero desde una buena base de conocimientos, valores, habilidades y aptitudes. Proporcionando las herramientas para saber manejar los mundos reales, virtuales y ficticios a los que nos enfrentamos hoy en día. Enseñar a pensar, desarrollar el pensamiento crítico, el trabajo en equipo, la creatividad y las habilidades de comunicación son fundamentales para saber priorizar, manejar el exceso de información, elegir entre mil y una opciones, resolver conflictos y encontrar soluciones.
¿Realmente estamos educando ciudadanos preparados, mental y éticamente para afrontar estos conflictos y las nuevas oportunidades que nos ofrece el mundo actual?. Educar en un complejo mundo globalizado, al que le sobra tecnología y le falta ética, es realmente el reto al que nos enfrentamos padres, profesores e instituciones.
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