Cuando vi El Camino Interior sentí que, aunque algunas historias eran más complicadas que otras, aunque los éxitos de unos eran más reconocidos que otros, casi todo el mundo podía reconocerse en un problema u otro de alguna forma. Había algún personaje que nos recordaba una situación similar, sea por el origen de la misma o por la forma de afrontarlo, aunque sea en el anonimato…todos nos enfrentamos a alguna situación complicada en algún momento de la vida, y nos diferenciamos en la forma de afrontarlo. La serie invita sin duda a la reflexión interior y empuja a actuar, da una esperanza que quizás por los momentos complicados que vivimos, es más necesaria que nunca. Miguel Ángel Tobías es la persona que ha hecho realidad esta pretensión de ayuda, porque esta era la intención. Su trayectoria en los medios audiovisuales es muy larga desde que entrara en el mundo de la televisión en el año 1994 de la mano de Isabel Presley, pasando por Telecinco, Antena 3, pasó por Radio Intereconomía, TVE y funda en el año 2003 Acca Media con la intención de unir cultura y entretenimiento, realizando grandes documentales, siempre comprometido con la difusión de valores, ha fomentado la difusión de causas sociales y benéficas.
Woman Essentia.- Todo camino interior viene condicionado de alguna forma por una situación exterior, de ahí el éxito del camino de Santiago… ¿qué podemos hacer para llegar a ese punto de interioridad en un mundo lleno de ruido?
Miguel Ángel Tobías.- Todo camino interior viene condicionado por la insatisfacción que sentimos con lo externo. Nos pasamos la vida en busca de “un dorado” que casi nunca alcanzamos. Y que si lo hacemos descubrimos la farsa, la estafa que supone buscar afuera lo que sólo podemos encontrar dentro. Nadie puede masticar ningún manjar con los dientes de otro. Solo con los nuestros que están dentro de nosotros, ¿verdad? Pues así es con todo. Los seres humanos somos seres espirituales por más que nos neguemos a esa dimensión. Pero descubrirla a veces requiere despojarse de muchas capas, de muchas corazas… nos da miedo mirar hacia adentro de nosotros mismos porque no sabemos lo que vamos a encontrar, y a veces incluso por lo contrario, porque si lo sabemos. Pero no hay otra opción si queremos encontrar el bien más anhelado para el ser humano, seamos conscientes o no: La Paz interior. Y el Camino es un catalizador de todo ese mundo interior. Es como un acelerador de partículas. Y el ruido es lo que utilizamos para tapar el miedo que tenemos al silencio, porque el silencio abre la puerta a nuestro mundo interior. Todo está interconectado.
WE.- El Camino interior no es un documental más sobre el Camino de Santiago, este se ha puesto de moda y atrae a todo tipo de personas, yo incluso tengo una conocida musulmana que se estaba preparando para hacerlo….¿por qué crees que este camino atrae a tanta gente?
M.A. Tobías.- Es que EL CAMINO INTERIOR no es sobre el Camino De Santiago. Yo podría haber rodado la serie en el desierto del Gobi, daba igual. Lo importante para la Serie era el espacio vacío y el silencio. Yo aproveché la circunstancia de la pandemia para poder recorrer un camino por el que no transitaba nadie y así poder generar un clima y una atmósfera intimas entre mis invitados y yo, para que no quedara más remedio que generar una conversación a corazón abierto. Fíjate que de los más de tres mil espectadores con los que me he comunicado hasta la fecha, muy pocos me hacen referencia al camino en si. Todos se centran en el contenido de la Serie, no en el decorado… Esto no quita, sin duda, que el Camino De Santiago tiene una tradición, una energía y una magia que invita y facilita a todos los que lo transitan a dejar de correr como pollos sin cabeza, que es cómo vivimos normalmente, a eliminar el ruido cotidiano, a mirar hacia adentro, y a reflexionar. Nadie termina el Camino como lo empezó.
WE.- ¿Podrías contarnos cómo surgió la idea de llevar a cabo “El Camino interior” y por qué?
M-A. Tobías.- Cuándo empezó la pandemia y nos confinaron, yo estuve dos meses como voluntario en una Residencia de Mayores. Era ese momento donde no había epis, ni mascarillas. Ahí me di cuenta, hablando con los residentes, sus familiares, los trabajadores de la residencia, de que las secuelas que iba a dejar la Covid, más allá de las propias de la enfermedad, serían psiquiátricas, psicológicas, emocionales y existenciales. Y pensé en que había que hacer algo que llevara optimismo, comprensión, escucha, herramientas a las personas, para tratar de paliar esas situaciones de miedo, angustia, ansiedad, incertidumbre que nos iban a invadir. Así pensé en crear un proyecto audiovisual en el que acompañado por personas que, habiendo tenido experiencias vitales y profesionales muy intensas, pudiéramos hablar de todo lo que nos afecta y nos preocupa a los seres humanos. Imagínate hasta qué punto me llevé el concepto, que de los 17 que somos, 13 hemos estado al borde de la muerte, lo que nos obligó en ese momento a repensar la vida, que es justo lo que la pandemia nos ha obligado a toda la Humanidad.
WE.- Has sido caminante de muchos caminos, caminando de compañero de los caminantes…¿Qué te ha aportado a ti personalmente?
M.A. Tobías.- Mira, yo que he recorrido muchos caminos por todo el mundo, por mi trabajo como director de documentales, se que no hay ninguna opción de recorrer un camino y que no te transforme en algún sentido. Si además cualesquiera de los caminos que recorremos, incluso para ir al trabajo cada día, lo hacemos acompañado, se convierte a la vez en una celebración de la vida y en una terapia, porque nos abrimos al otro, el otro se abre. Y esto además de ser muy liberador, genera una comunión de almas. Y esto es lo que ha pasado entre nosotros, los protagonistas de la serie. Yo he añadido 13 amigos nuevos a mi vida, porque tres ya lo eran de antes.
WE.- A lo largo de nuestras vidas nos enfrentamos a diferentes miedos, unos justificados y otros están dentro de nosotros…¿Cuál es la cualidad más importante para vencer el miedo?
M.A. Tobías.- Darnos cuenta básicamente de dos conceptos: una que el 99,9% de las cosas que nos dan miedo, no tienen prácticamente ninguna posibilidad estadística de que sucedan. Yo he hecho caída libre, descenso de barrancos, escalada, acrobacias aéreas con planeadores, buceo en cuevas… y si hubiera pensado en posibles accidentes no hubiera hecho nada. Pero la realidad es que ¡hay que atreverse a vivir! Y la segunda es que “la VIDA con mayúsculas está al otro lado del miedo”. A este lado está la subsistencia. Por eso hay que atreverse a saltar, porque sino lo hacemos y tenemos la suerte de llegar a ser muy mayores nos arrepentiremos de ello.
WE.- ¿Es malo tener miedo?
M.A. Tobías.- ¡Es humano! El miedo nos libra también de exponernos a riesgos o situaciones peligrosas. El problema es cuando ese miedo nos paraliza y nos impide vivir la vida que queremos vivir. Y no me refiero a miedo físico, sino al psicológico y sobre todo al emocional. Vivimos muchas veces en función de los dictados de otras personas o de sus opiniones, sus críticas, en vez de hacerlo en función de nuestros deseos y sueños profundos. Y el problema con esto es que nos causa enfermedades de todo tipo. Yo he defendido, en Congresos por todo el mundo, que no hay nada más patológico, es decir que cree más enfermedades o las potencie, que vivir una vida que no se quiere vivir. Por eso, siempre que puedo, en conferencias que imparto sobre motivación explico qué es el miedo, cómo rige nuestra vida sin darnos cuenta, como desenmascararlo y cómo dominarlo.
WE.- Se habla mucho de historias de éxito, y se comenta la necesidad de haber fracasado antes, sin embargo este concepto no nos interesa realmente demasiado, aunque si tiene mucho valor en la cultura anglosajona.
M.A. Tobías.- Para mi el único fracaso real en cualquier orden de la vida, personal o profesional, es no haberlo intentado. Yo he creado muchos proyectos en mi vida, unos han salido bien y los he disfrutado, y otros no han salido como yo esperaba y lo he aprovechado para aprender.
WE.- En resumen ¿Qué es el fracaso? ¿Qué es el éxito?
M.A. Tobías.- Ya he contestado un poco a eso, pero si podría decir que el fracaso más terrible es no haber aprendido nada cuando se fracasa. Y el éxito es como ese caramelo que te encanta y que lo metes en la boca. Hay que disfrutar de él y saborearlo, sabiendo que acabará derritiéndose y desapareciendo. Por eso yo siempre he dicho que ni los fracasos me hunden ni los éxitos me elevan. El primero te puedes servir mucho y el segundo se acabará esfumando. Hay que tratar de mantener una posición centrada en la vida y no creerse menos de lo que uno es cuando algo no sale bien, ni más cuándo se está arriba. Yo he recibido de mi madre desde niño esa enseñanza y procuro no olvidarla.
WE.- Todas las vidas de las personas que aparecen tienen un punto en común que es el haber tenido un punto de inflexión en su vida… Me imagino que ¿tú también habrás tenido un punto de inflexión?
M.A. Tobías.- Si. La verdad es que antes o después todos los vamos a tener, porque la vida es un camino de despedidas, y para quien no lo es, la razón es que se fue antes. Así que soy muy consciente de mi propia impermanencia, de la impermanencia de las personas y de las cosas. Tenemos que saber que este es el momento de hacer todo lo que queramos y sintamos, porque quizá mañana ya no estemos aquí. Lo se muy bien al haber recorrido el mundo en zonas de guerra, de catástrofe, de pobreza. De haber visto morir a mucha gente que un minuto antes estaban tan vivos como tú o como yo ahora. Y lo viví de un modo muy directo las tres veces que he estado al borde de la muerte: ahogado y envenado en África, y escalando una montaña en la cordillera de Los Andes. Trece años después de salir vivo milagrosamente de aquella montaña, decidí escribir Renacer en los Andes, para ayudar a las personas a comprender el sentido de la vida, a no rendirse, y a jamás perder la esperanza, porque por muy mal que estén las cosas, nunca sabemos cuándo puede suceder algo que convierte la oscuridad en luz.
WE.- Seguimos con la superación, en tus conversaciones con los protagonistas vemos los diferentes caminos que han recorrido todos ellos, unos más complicados que otros, pero todos consiguieron vencer las circunstancias y cambiar la realidad que tenían… esto no tiene nada que ver con los slogan facilones a los que nos someten permanentemente de “si lo quieres puedes”, “sueña y lo conseguirás”, que parecen ofrecer un éxito seguro sin esfuerzo solo por desearlo…
M.A. Tobías.- Mira, yo siento vergüenza muchas veces cuando oigo estupideces en bocas de “expertos” teorizando sobre lo que no han vivido. Por eso solo creo en los discursos de personas que han vivido situaciones limite y que cuentan cómo han salido de ellas y lo que han aprendido. Hay que tener autoridad moral para hablar de determinadas cosas, y esa autoridad sólo te la da haberlo vivido en primera persona. Hubo un tiempo en que pasaba consulta de nutrición y daba conferencias sobre ello y jamás le dije a ningún paciente que cambiara algún hábito en su alimentación que yo mismo no cumpliera a pesar de no tener la enfermedad por la que se lo prescribía, no se si me explico. Y ahora, en mis conferencias sobre diferentes temas, no hablo de nada que no haya vivido, estudiado, investigado y que no ponga en práctica o sea la guía de mi propia vida. ¡Todo junto! Creo que todos necesitamos referentes con autoridad moral para serlo.
WE.- El mundo está convulso, guerra, crisis energética, ausencia de líderes que nos dirijan, ausencia de muchos valores sociales, la educación está por los suelos, parece que está todo patas arriba…¿tiene sentido seguir soñando?
M.A. Tobías.- No es que tenga sentido, es que ¡es lo único que tiene sentido! Lo único que nos salvará del caos es aferrarnos a nuestros sueños e ir tras ellos, porque así estaremos seguros de que estamos caminando en la dirección correcta. Fíjate, si todos estuviéramos centrados en conseguir nuestros sueños y en ayudar a otros a que consiguiesen los suyos, no habría tiempo ni espacio para la maldad, para la desidia, para el decaimiento, para el odio, para la envidia… porque cuando uno está centrado en su camino tiene felicidad, alegría… que quiere compartir con los demás. Esa es la razón de porque los sueños de Nadal, son nuestros, son de todos. Nos hace mejores, nos dan fuerza. Hay un axioma científico que explica: Si quieres crecer intelectualmente júntate con gente lista, si quieres adelgazar júntate con deportistas, si quieres subir al Everest júntate con montañeros… Si quieres coger fuerza y aprender a perseguir tus sueños, júntate con gente que persigue los suyos, escucha a quienes ya lo han hecho, ve EL CAMINO INTERIOR ¿me explico?
WE.- Totalmente. Siempre se ha dicho que viajar abre la mente y tú no paras de hacerlo. ¿Qué crees que falta en la sociedad para que cambiemos de una vez?
M.A. Tobías.- Estamos cambiando. Cada vez hay más gente viviendo “despierta”. Yo llevo años viendo esta evolución precisamente por mis viajes por el mundo. Lo que pasa es que todavía no hemos alcanzado la más crítica para que notemos ese cambio de manera global, pero sucederá. ¡Es inevitable! ¿Y por qué estoy tan seguro? Porque si no, nos extinguiremos como especie y al final, antes de la gran crisis mundial que vendrá si o si a la vez en todos los órdenes: económico, social, político, medioambiental, sanitario… todos aquellos seres humanos que hasta entonces no habían despertado, lo harán. En ese momento habrá un gran cambio de paradigma y pasaremos de ser sapiens sapiens, cosa que no ha sucedido nunca de verdad, ya que no podemos denominar “sabía” a una especie que construye armas para matar a otros de su especie, que se carga ecosistemas, que sobreexplota el planeta en el que vive, que tira millones de toneladas de comida, mientras mil millones pasan hambre, etc. etc. etc. ¿verdad?. Pues pasaremos a ser homo espiritalis, con permiso de Harari y su homo deus, incluso, y con suerte, sin pasar por él. El homo espiritalis será así un nuevo ser humano con una conciencia clara de la trascendencia, lo que nos llevará a un modelo existencial de colaboración, solidaridad y empatía reales y permanentes. Habremos aprendido que si yo colaboro en tus sueños y en los sueños de los otros, todos lo harán en los nuestros.
WE.- Eres hermano de mujeres, hijo de una mujer, nieto de otra…Cuando te oigo hablar me da la impresión de que tu madre ha sido muy importante en tu vida ¿porqué?
M.A. Tobías.- Mi madre es mi faro, mi luz, mi motor, mi sentido, mi amor profundo, ¡mi todo! ¡La amo! Y como decía el protagonista de una película que confesaba lo mismo por su madre: “y que se jodan los psiquiatras” (risas).
WE.- ¿Qué cualidades crees que aporta la mujer al mundo? ¿Nos dejan actualmente ser como somos realmente?
M.A. Tobías.- Necesitaría un libro, que a lo mejor escribo, para hablar del valor profundo que la energía femenina aporta al mundo, a la sociedad, a la vida. Creo que las mujeres tenéis el papel más difícil sin duda en esta obra de teatro que llamamos vida porque se os ha colocado en la obligación de tener que ser a la vez la actriz protagonista, actriz secundaria, extra… y es muy difícil representar varios papeles en distintos niveles a la vez y de manera brillante. Sobre la mujer recae el mayor peso social, educativo, familiar, de conciliación, de competición en desigualdad, y creo que esto está desvirtuando en cierta manera los roles genética y antropológicamente establecidos, haciendo que haya una enorme confusión e insatisfacción tanto por hombres que se sienten muchas veces desplazados y amenazados en su rol, como por mujeres que sienten la presión, muchas veces, de jugar un papel en el que no se sienten realizadas.
WE.- Con la cámara a cuestas y me imagino que con la mochila también… ¿Qué significa para ti estar detrás de la cámara? ( a veces parece que detrás de una cámara se pierde uno lo que está pasando)
M.A. Tobías.- No. Detrás de una cámara no sólo no se pierde nada, sino todo lo contrario. Eres capaz de estar mirando de manera enfocada aquello que quieres mostrar, lo que para ti es más importante en cada momento, abstrayéndote precisamente de todo lo superfluo que vemos por nuestra capacidad panorámica de ver con los ojos abiertos. Fíjate que cuándo un director de cine mira por el ojo de una cámara, el otro lo tenemos cerrado. Es así que yo he podido fijarme y he podido mostrar al mundo a través de mis películas y documentales, realidades que normalmente no vemos o no queremos ver, pero que muchas veces es vital que se conozcan para generar conciencia social, pensamiento crítico, luchar contra las injusticias y en favor de los Derechos humanos. Ojalá pudiéramos hacer que todo el mundo mirara a través del ojo de una cámara, porque para hacerlo hay que dejar de mirarse al ombligo. Y hay mucha necesidad de esto en el ser humano.
WE.- ¿Cuál es la realidad que nos vas a mostrar próximamente? ¿Cuál es tu próxima misión?
M.A. Tobías.- Pues la verdad es que siempre estoy con varios proyectos a la vez. Por un lado, estoy volcado en la difusión de EL CAMINO INTERIOR, que debería ser vista en familia, en los colegios, institutos, universidades… porque tiene mensajes potentes para todos. Estoy rodando ya un proyecto sobre el cuidado del Planeta, GENERACIÓN SLIVING, terminando de montar la última película, HONEYMOON, preparando el estreno de EL SECRETO DE IBOSIM, la primera película de cine del mundo Sostenible y con Huella de Carbono 0, estoy escribiendo un libro sobre la necesidad de aprender a vivir, y tengo un gran proyecto de serie documental sobre las consecuencias del hambre en el mundo LAS CARAS DEL HAMBRE… y lo que vaya surgiendo. Estamos aquí en este mundo para hacer, el tiempo de hablar ya ha pasado.
Sin duda tú no paras de hacer, es una maravilla que haya gente como tú en el mundo…
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