Nadal, la fórmula de lo extraordinario

Rafael Nadal hace suyo por méritos propios lo extraordinario, ganar siempre (Roland Garros)

Este hombre tiene 32 años y ha dedicado la mayor parte de su vida a trabajar para ser extraordinario en su profesión. Ahora llora como un niño el ser campeón del mítico torneo de tierra sumando 11 coronas en 11 finales jugadas, mientras el jugador al que ha ganado mira a su alrededor asimilando algo que seguramente ha visto más de una vez por televisión.

Pasarán los años y las generaciones venideras seguirán tomando consciencia del valioso ejemplo de competición y desafío personal que supone la carrera deportiva de Rafa Nadal.

Quiero vivir mi profesión con este hambre de éxito, con el foco puesto en lo que para mí es más importante, mis anhelos. Seguro que has oído en más de una ocasión la expresión «no se puede ganar siempre», habría que añadir «con excepciones». Este deportista es un ejemplo increíble de algo extraordinario, lo suyo es mucho más que EXCELENCIA. Está la alcanzó hace años. Nadie, absolutamente nadie, hubiera creído esto posible, ni siquiera pensando en él cuando ya lo había ganado varias veces y era el número 1 del mundo.

Hay algo que está por encima de las creencias de otros, el compromiso personal con lo que uno anhela para sí mismo.

Sí, porque el compromiso personal con los propios sueños alimenta el motor que permite alcanzarlos, incluso aunque estén allí lejos. Este compromiso se transforma en el trabajo que se hace día a día. Sin el mismo llegar sería imposible.

Hay quien se aburrió de verlo ganar, cómo si seguir haciéndolo fuera una falta de respeto, cuándo justamente es lo contrario, el máximo respeto y compromiso por los sueños propios. ¿Puede haber mejor ejemplo de vivir conectado con los anhelos que seguir trabajando y mejorando a diario para alcanzarlos?

Las claves que explican esta proeza son varias y seguro que algunas no las conocemos, pero sí las que no faltan y siempre están, me parece interesante compartirlas porque serán tantos momentos en los que las circunstancias no nos acompañen y desesperemos que es de gran valor tener a mano este recordatorio:

LA FÓRMULA DE LO EXTRAORDINARIO:

SOÑAR CADA DÍA + AMAR LO QUE HACES + ACCIÓN ANTE LAS DECISIONES + ACEPTAR LOS CAMBIOS + CUIDAR TU EQUIPO + HUMILDAD PARA SEGUIR APRENDIENDO + GRATITUD PARA CON LA AYUDA + AUTORESPONSABILIDAD EN LA DERROTA + GENEROSIDAD EN LA VICTORIA + DISFRUTAR EL DESAFÍO PARA DISFRUTAR LA VIDA